Los intentos de fraude a las compañías de
seguros crecen con la crisis y emerge un nuevo tipo de defraudador: el que lo es por pura necesidad económica El hombre alegó una lesión y fue pillado montando en bicicleta. Josep María Vilamajò lleva 40 años en el oficio de investigador privado y ya hay pocas cosas que le sorprendan, pero el caso que a continuación detalla le dejó perplejo. Hace un año, una compañía de seguros le encargó el caso de un hombre que había perdido un brazo en un accidente de coche; aludía que se había cortado con la sierra mecánica que transportaba. Resolverlo no fue demasiado complicado: el corte era demasiado limpio como para habérselo hecho en un accidente; y un dedo de la mano estaba en sospechoso mal estado. El hombre pertenecía a una familia, de Valencia, en la que todos estaban en paro. Habían suscrito más de ocho pólizas de seguro y le habían convencido entre todos para que se amputara un brazo para cobrar en torno a 600.000 euros. El hombre bajó al bar a tomarse un carajillo, se aplicó una anestesia local y se cortó el brazo a la altura del codo. Olvidó retirar el anillo de boda antes de amputarse la extremidad. Intentó recuperarlo a posteriori, lastimando el dedo. El caso es de una crudeza brutal y resulta, a todas luces, extremo. Pero pertenece a esa nueva categoría de fraude que ha emergido con la crisis: el que se lleva a cabo por necesidad económica. “Con la crisis se ha producido un aumento del fraude de entre el 25% y el 30%”, asegura Javier Fernández, portavoz de la Asociación Empresarial del Seguro Unespa. En 2003 se produjeron 54.114 intentos de fraude; en 2011, 130.959 Fuente: El Pais JOSEBA ELOLA I SEP 2012 - 19:37
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Un estudio de Mapfre pone en entredicho la creencia de que son los conductores más jóvenes quienes más accidentes sufren y, por este motivo, son el segmento de clientes que se ve obligado a pagar las pólizas más caras en la mayor parte de los casos.
Por suerte, con la amplia oferta de productos y compañías existentes en la actualidad, cada una especializada en un perfil determinado, hay algunas que han comenzado a adaptar sus seguros, coberturas y precios a los conductores de menor edad. Éste es el caso de Mapfre con su seguro barato para jóvenes denominado YCAR. Precisamente la póliza YCAR, el primer seguro de pago por uso en España, ha motivado la realización de este estudio por parte de laFundación de la compañía que confirma que sólo el 2% de los jóvenes que contrata este seguro tiene una tasa de siniestralidad alta. Este llamativo datoserviría para desmitificar la tendencia de los jóvenes a sufrir incidentes de tráfico. Se evidencia que la edad es un factor influyente en siniestralidad pero no es un factor determinante. No en vano, el informe recoge quecerca del 90% de los conductores entre 18 y 30 años tiene un bajo perfilde riesgo. Tal y como revela este estudio de Mapfre, más que la edad, los factores que más influyen en nuestro historial de siniestralidad es la experiencia y el número de veces que utilizamos nuestro vehículo, especialmente cuando se trata de vías urbanas. Precisamente son los hombres jóvenes quienes más conducen en comparación con las féminas, de ahí que el número de accidentes sea mayor (en concreto, casi un12% más). Perfiles de bajo y alto riesgo El análisis pone también de manifiesto que el perfil del conductor novel con menos riesgo de sufrir un siniestro es un joven de 26 años, con casi 6 años de experiencia al volante y que realiza 2,2 viajes diarios, en los que invierte 55 minutos. Este modelo de conductor de reparte sus kilómetros casi al 50 por ciento entre las carreteras más seguras (con un límite de velocidad de 100 o 120 km/h) y el resto de vías. En esta tipología encontramos prácticamente el mismo número de hombres que mujeres. En el extremo opuesto, se sitúan los más jóvenes (22 años y 4 meses), con menos de 8 meses deexperiencia y que llevan a cabo más de 6 viajes al día, de trayecto medio de casi 11 km. Estos jóvenes pasan al volante casi 2 horas y media al día y sólo uno de cada tres desplazamientos los realizan por carreteras “seguras”. En este grupo, 7 de cada 10 son hombres. Se incrementan las posibilidades de sufrir un accidente en este grupo dado que este tipo de perfil tiende a utilizar el coche con mayor frecuencia que el grupo de bajo riesgo durante los fines de semana. Este estudio llevado a cabo entre más de 60.000 jóvenes revela también que, al comparar los resultados entre las distintas comunidades autónomas, se evidencia que los conductores de menor edad de Madrid son los cuentan con menor experiencia al volante. De hecho, son los que menos viajes diarios realizan con su proprio vehículo y, sin embargo, su velocidad máxima es un 4% superior al resto de la media nacional. Fuente: seguros.es . |
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Octubre 2012
AuthorMiguel A. Martínez Lagos Archives
Octubre 2012
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